El sonido se hace imagen, la imagen se transforma en sonido, cuarenta principales y fuera el mundo que gira más perezoso, recreándose en la incertidumbre del fin de semana, una casa deshabitada, misa oscura en su interior, imágenes en azul y negro, los gatos no maullarán, coros sinuosos emplazándote al espectáculo vedado del viernes noche, … Sigue leyendo La piel del lobo (culpables placeres de infancia)
Extractos Sonoros
Memorias dulces y amargas de discos que marcaron mi vida. Estilo libre.
El patio, abriendo puertas
Conocía solo un pedazo, una de oídas, lo que Ángel cantaba a grito pelado en los botellones, lo que escuchábamos en el Dónde Vamos entre partida y partida, entre cerveza y cerveza: «Creo recordar que por la noche el pájaro blanco echó a volar de nuestros corazones...». Era triste, sonaba desesperada. Me gustaba. Mucho más … Sigue leyendo El patio, abriendo puertas
Al final de este viaje (de ética y principios)
La reivindicación imprudente de principios y derechos jamás necesitados continuaba su curso. Seguíamos siendo jóvenes después de todo, y al impulso autodestructivo generado por el rock, a la pose atormentada de quien escucha y hace alarde de canciones retorcidas, de esas que sugieren más que muestran, era necesario también añadir las dosis justas de conciencia … Sigue leyendo Al final de este viaje (de ética y principios)
La última sorpresa (hasta siempre, maestro)
Las emociones son siempre difíciles de gestionar. Algunas veces, las menos, logran ser barruntadas con tiempo suficiente como para ponerles coto; otras, en cambio, asaltan sin previo aviso. En ese sentido, y tomando únicamente las emociones auténticas, esas que no admiten ser anticipadas, podría decirse que las canciones son grandes catalizadores de las emociones: desencadenan, … Sigue leyendo La última sorpresa (hasta siempre, maestro)
Honestidad brutal, sentimiento trágico
Cierras los ojos y te sumerges en la oscuridad. En el rasgueo distorsionado de la guitarra, en los teclados lúgubres, en la pregunta sin respuesta, quién escribirá la historia de lo que pudo haber sido, y el alma post-adolescente se deja entonces arropar por el sentimiento trágico de la vida. No hay marcha atrás: haces … Sigue leyendo Honestidad brutal, sentimiento trágico
El espíritu del vino, caminos de exceso
De Héroes o del Último. Debate absurdo y periférico, pero al que todos nos prestábamos aun cuando ninguno de los dos grupos seguía ya en activo. Yo me declaraba del Último y blablablá. Luego estaba El espíritu del vino. Excepción que confirmaba la regla, álbum complejo, excesivo, al que me había entregado primero con reservas … Sigue leyendo El espíritu del vino, caminos de exceso
Paco Ibáñez en el Olympia
Canturreaba siempre entre dientes. Caminando por las tripas de la ciudad, adolescente de pasos perdidos, sentado en el escalón de algún portal del Perchel, tardes de primavera, esperando a Ángel para ir a echar un billar. Canturreaba también de noche, a la luz de farolas en torno a las cuales las hojas de los árboles … Sigue leyendo Paco Ibáñez en el Olympia
Enemigos de lo ajeno, noches nuevas
De Héroes o del Último. Debate absurdo y periférico, pero al que todos nos prestábamos aun cuando ninguno de los dos grupos seguía ya en activo. Yo me declaraba del Último, no sabría decir muy bien por qué. Los había escuchado más, sencillamente. Había otros que se desmarcaban del debate y preferían a Extremoduro. Gente … Sigue leyendo Enemigos de lo ajeno, noches nuevas
Álbum de oro, tardes de domingo
Languidecía la tarde infinita de la infancia, asomada a la ventana de mi habitación. Tarde de domingo, luz renovada de cambio horario. Del otro lado de los edificios la calle subía hacia remotos paisajes imaginados por mi mente desde el primer uso de razón. Otras veces había intuido esos mismos paisajes bajo un cielo gris … Sigue leyendo Álbum de oro, tardes de domingo